martes, 29 de septiembre de 2020

PERSPECTIVAS GEOGRÁFICAS DEL CORONAVIRUS. TERRITORIO, POBLACIÓN, GÉNERO Y AMBIENTE

 



POR ZOOM 

ID: 857 3170 0713

PASSCODE: 304136

INVITACIÓN DEL PROFESORADO DE GEOGRAFÍA DEL INSTITUTO SUPERIOR NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN, DE MERCEDES, SAN LUIS. ¡MUCHAS GRACIAS!


domingo, 13 de septiembre de 2020

SITIADOS POR LA PANDEMIA




Ricardo Méndez. Gutiérrez del Valle. Sitiados por la pandemia. Del colapso a la reconstrucción: apuntes geográficos. Septiembre de 2020 Editorial: REVIVES (https://revives.es) Madrid-28005 (España) 




Hoy, 30 de junio de 2020, al iniciar la escritura de este texto, se cumplen seis meses desde que las autoridades chinas comunicaron a la Organización Mundial de la Salud (OMS) la aparición de un brote infeccioso, provocado por un nuevo tipo de coronavirus, en la ciudad industrial de Wuhan, a orillas del Yangtsé. Tan sólo medio año después, las cifras oficiales reconocen unos diez millones y medio de personas contagiadas en el mundo y más de medio millón de fallecidas, si bien resulta evidente que las cifras reales son superiores, ante las limitaciones en las pruebas diagnósticas realizadas y los déficits de medios y capacidad para obtener información que aquejan a los servicios de salud de numerosos países. Por otra parte, la situación está lejos de remitir, pues la curva epidémica sigue en ascenso y en la segunda mitad del mes de junio los nuevos contagios oscilaron entre 150.000 y 200.000 diarios, con cifras de fallecidos por encima de los cinco mil cada jornada. 

Salvo una escasa minoría negacionista, casi nadie duda ya que el mundo se enfrenta a la mayor crisis sanitaria del último siglo, provocada por el virus identificado como SARS-CoV-2 (Severe Acute Respiratory Syndrome Coronavirus 2), que provoca la enfermedad infecciosa COVID19 (Coronavirus Disease 2019). El día 11 de marzo, cuando se llevaban 118.000 casos notificados y 4.291 fallecidos, la OMS declaró el estado de pandemia, un concepto que alude a la difusión de la epidemia por varios continentes y a la combinación de procesos de contagio importados y comunitarios.


SITIADOS-POR-LA-PANDEMIA.pdf (revives.es)

sábado, 5 de septiembre de 2020

FORO 26: EL CORONAVIRUS. Una experiencia de aprendizaje

 


FORO 26: EL CORONAVIRUS. Una experiencia de aprendizaje


El primer trimestre del año 2020 ha registrado una experiencia histórica que marcará un hito en la evolución de la humanidad. La expansión de una pandemia de forma rápida, que ha provocado una incertidumbre y temor en gran parte de la población del planeta. La coexistencia de la difusión del virus biológico y la contaminación por noticias falsas ha generado un ambiente de caos excepcional.
Desde el Geoforo Iberoamericano de Educación queremos crear un espacio de reflexión sobre los sucesos que estamos viviendo. En primer lugar buscando una reflexión sobre qué es lo que está sucediendo y más tarde analizar nuestros comportamientos individuales y sociales en los espacios de diferente escala y simbolismo: desde el espacio físico doméstico hasta el espacio mundial virtual.

Como comunidad de conocimiento crítico esperamos las aportaciones de las personas que viven en diferentes lugares del planeta, en especial en la comunidad iberoamericana. Queremos que puedan participar en el intercambio de argumentos para generar un saber escolar, académico, que permita comprender las angustias personales, pero también explicar las decisiones políticas, económicas y sanitarias difundidas, muchas veces contradictorias.

En primer lugar es necesario definir el COVID-19. Según define la OMS, "es la enfermedad infecciosa causada por el coronavirus que se ha descubierto más recientemente. Tanto el nuevo virus como la enfermedad eran desconocidos antes de que estallara el brote en Wuhan (China) en diciembre de 2019". El origen léxico del Covid-19 proviene de 'co', en alusión la forma de corona solar del virus, 'vi' corresponde a la palabra virus y 'd' hace referencia a enfermedad ("disease" en inglés). Finalmente se le puso el número 19 por el año en que se detectó en seres humanos.

Para su estudio en el medio escolar contamos con materias de ciencias experimentales, como la Biología, que puede explicar la diferencia entre virus y bacterias. Las bacterias son microorganismos que contiene una sola célula, y la mayoría de ellas no provocan daño alguno, si bien algunos de estos pequeños seres vivos invaden nuestro cuerpo y se reproducen de forma incontrolada. Por eso se deben combatir con antibióticos.

Por su parte, los virus son organismos que atacan otras células, denominadas hospedadoras, en las que introducen su propia información genética que “reprograma” la de las células huésped para que éstas produzcan muchos nuevos virus, que luego abandonan las células infectadas. Es decir, se introducen en las células humanas y sólo pueden ser combatidas por nuestro sistema inmunológico, previamente adiestrado, o no, con vacunas.

Ya sabemos que existen diferentes formas de expansión de estos gérmenes, en especial las pequeñas gotitas que expectoramos al hablar y respirar y que pueden infectar a otras personas. Ello provoca una expansión rápida de la enfermedad. Una pandemia.

¿Qué se puede hacer frente a ello? Aquí entra en juego la explicación geográfica del territorio, la organización por parte del Estado de las funciones sociales básicas, como es en este caso la salud pública y la relevancia de la difusión espacial que se puede mostrar a través de muy variada cartografía. El Estado en sus diferentes escalas (municipios, regiones, estados, naciones, comunidades internacionales) debe hacer frente a los virus como nuestro sistema inmunológico lo hace en nuestro cuerpo. Para ello cuenta con hospitales, personal sanitario, fármacos, quirófanos, instrumental físico como respiradores, UCIs.

Un Estado que sabe organizarse y que tiene medios para enfrentarse a la enfermedad será más eficaz que un Estado que no cuenta con recursos públicos, bien porque no tiene medios o porque ha delegado esta función en las empresas privadas, que restringen el acceso al derecho universal de la sanidad por medio de una contraprestación económica.

Entonces aparece en escena la población. ¿Cómo responde la población? De dos formas, podemos aventurar. Una, eligiendo a sus representantes que nos provean de los medios necesarios en caso de una alarma de pandemia, como este caso. Dos, confiando en las medidas adoptadas por las instituciones y siguiendo sus recomendaciones para superar la pandemia. Ello supone un determinado grado de cultura y disciplina social.

Pero ello no evita, sí que puede paliar, los efectos de dichas medidas. Por ejemplo, cómo pasamos un confinamiento en casa. Cómo evitamos socializarnos en la vía pública para impedir la posible propagación del virus. Cómo concienciamos a la población a través de un aprendizaje escolar, que es nuestra función social.

Nuestras reacciones responden a lo que podemos denominar el espacio vivido, que se corresponden con nuestras ansiedades, miedos, estrés, expectativas. Pero además seguro que juzgamos las medidas que se han implantado y hemos leído algo que nos corrobora lo que queremos escuchar. Este lugar, se transforma de vivido en espacio percibido, pues puede estar contaminado por las fake news; ante ello, hemos de ser cautos, pues eso supone un prejuicio social, un estereotipo propio del espacio percibido. Después hemos de criticar con argumentos las concepciones territoriales, las medidas adoptadas como cierre de fronteras, guerras comerciales implícitas y no declaradas, las fluctuaciones de los mercados, los expedientes de cese de trabajo, el paro que aboca a una mayor precariedad. Todo ello debe ser argumentado con solvencia, con datos y con teorías consistentes.

Estas son algunas de las preguntas que podemos compartir en el foro 26 del Geoforo. La Educación Geográfica tiene un desafío con esta pandemia: mostrar su utilidad y provocar una participación ciudadana. Lo podemos hacer. Podemos invitar a todos/as nuestras alumnas a participar en este debate.


CONSELHO DIRETIVO DO GEOFORO

Link Artículo ¿Cómo será la Europa post-Covid-19? GEAB